*(AW) La Fundación Madres de Plaza de Mayo, gerenciada por Sergio
    Schoklender y fiscalizada por Felisa Miceli, no paga los sueldos a
    los trabajadores de la radio, la Universidad y los obradores en
    donde se construyen las viviendas de la inmobiliaria que tienen en
    sociedad con el gobierno kirchnerista. Hay paros en la radio y en
    los obradores, y una tristeza generalizada por el penoso presente de
    un espacio que remató su prestigio. Aquí reproducimos la información
    enviada por los compañeros, que prefirieron no dar nombres por temor
    a represalias* 
(Buenos Aires, 4 de diciembre. Grupo de trabajadores de la Radio de las 
Madres) Los trabajadores de la AM 530 - La Voz de las Madres, y de los 
obradores en donde se construyen las viviendas del plan "Sueños 
Compartidos", realizan paros en reclamo del pago de los sueldos de 
octubre, en un contexto de profunda crisis financiera de la Fundación 
Madres de Plaza de Mayo, la empresa cuyo gerente general es Sergio 
Schoklender.
La Fundación ha recibido desde 2006 a la fecha más de 50 millones de 
pesos enviados por el gobierno de los Kirchner (datos publicados por el 
Boletín Oficial), y es supervisada por Felisa Miceli desde que fue 
despedida de su cargo de ministra de Economía, tras el escándalo por los 
más de 200.000 dólares encontrados en el baño de su despacho, que nunca 
pudo justificar, y por los que se encuentra procesada judicialmente.
Sin embargo, la Fundación no paga en término los módicos y empobrecidos 
sueldos desde hace varios meses, con los problemas lógicos para 
trabajadores de la radio, la Universidad y los obradores de las 
viviendas, lo que motivó una respuesta lógica, como son los paros en la 
radio y en los obradores hasta que se paguen los salarios.
En la radio, el paro comenzó el martes 2 al mediodía, y sólo se 
escuchaba música en continuado, con una excepción que habla a las claras 
del compromiso incondicional de los trabajadores de la emisora 
(operadores técnicos, locutores y periodistas) con la historia de las 
Madres: el paro se interrumpió el miércoles a las 20.00, para emitir uno 
de los espacios que conduce Hebe de Bonafini, y fue retomado a las 
21.00, cuando concluyó el programa. El gesto se repetirá el jueves a las 
16.00 -si antes no se pagaron los sueldos y el paro no se hubiera 
levantado- para transmitir el habitual discurso desde la Plaza de Mayo 
de los días jueves, tras la marcha semanal de las Madres.
El gesto de los trabajadores es muy claro: el paro no es contra las 
Madres y su gloriosa historia, sino contra la codicia y matonismo 
empresarial de Schoklender, quien se encarga precisamente desde hace 
años de destruir ese prestigio a cambio de dinero, con la complicidad de 
un gobierno que negocia con los derechos humanos de la misma manera que 
pretende blanquear los fondos de los delincuentes que hicieron fortunas 
con el saqueo del país, y que depositaron en el extranjero.
En la Universidad, los trabajadores también vienen padeciendo el atraso 
en el pago de sus sueldos desde hace meses y muchos profesores se 
retiraron de sus cátedras por ese motivo. El abandono de un proyecto 
luminoso y necesario se hizo evidente desde que la Fundación empezó con 
la construcción de las viviendas, en octubre de 2006.En los obradores, 
ni los matones y patovicas de Schoklender parecen haber cobrado sus 
sueldos, pues no pudieron impedir los reclamos airados de los 
trabajadores, que incluyó un piquete y corte del tránsito sobre Hipólito 
Yrigoyen al 1500, frente a las puertas de la Universidad y la sede de la 
Fundación, en el mediodía del miércoles. Por la tarde, los del obrador 
de Castañares, en Villa Lugano, directamente llevaron su protesta a la 
General Paz, a la que cortaron en forma total durante un par de horas.
El desastre financiero de la Fundación Madres de Plaza de Mayo deja en 
claro el despropósito inicial de esta historia: una cosa es fundar una 
Universidad Popular y una radio, un proyecto educativo, cultural y 
comunicacional que no admite objeciones, con excepción de la derecha 
recalcitrante y enferma. Pero ponerse a construir casas con fondos 
oficiales, erigirse en patronal de cientos de trabajadores, y manejar 
millones de pesos a cambio de apoyo incondicional al gobierno K., fue el 
punto que dejó expuesta una política de vil intercambio de dinero por 
prestigio.
Ese fue el punto precisamente que alejó a muchas Madres de distintos 
puntos del país de la Asociación que dirige Hebe de Bonafini, quienes 
cuestionaron duramente la decisión impulsada por Schoklender. Una 
decisón espuria que dinamita un espacio histórico cargado de gloria por 
luchar contra dictaduras y fascistas de toda laya, a favor de los 
derechos humanos y de un mundo con justicia social, para fundar una 
empresa que hace agua por todos lados, en donde la corrupción ya es 
evidente.
AGENCIA DE COMUNICACION RODOLFO WALSH
http://argentina.indymedia.org/news/2008/12/642237.php